Sofía tan sólo tiene cinco años de edad y desde hace exactamente un año ha tenido que enfrentarse a un tumor cerebral, tras tres operaciones y un largo año de tratamientos de quimioterapia, protonterapia, logopeda, rehabilitación y terapia ocupacional, Sofía no ha perdido nunca esa preciosa sonrisa que la hace tan especial. Nos ha dado una lección de lucha, perseverancia y optimismo.
Debido a este ejemplar comportamiento y por haber finalizado su tratamiento, la Fundación Pequeño Deseo, ha viajado hasta el famoso reino de hielo, mucho más conocido como Arendelle, para traer hasta nuestro municipio a la mismísima Elsa y a su hermana Ana, y así conceder a Sofi su pequeño deseo de conocerlas.
Para ello han escogido nuestro Convento de La Inmaculada Concepción, tras unos momentos de nerviosismo, entusiasmo y risas, han aparecido las dos hermanas que han cubierto a Sofía en un halo de magia que nunca olvidará.


Sofia y su familia quieren dar las gracias a la Fundación Pequeño deseo por el compromiso que tienen con todos los niños y niñas que padecen estas y otras duras enfermedades, haciendo más llevadero sus estancias en los hospitales y ofrecerles estas preciosas sorpresas. También nos han comunicado que no querían perder esta oportunidad para agradecer todo el cariño y apoyo que han recibido de la gran familia que es el Colegio Charles Dickens, desde sus amigos y amigas de clase hasta el resto del alumnado, personal docente, dirección y AMPA. Así como al Convento de La Inmaculada Concepción por ceder el espacio para esta maravillosa sorpresa.
“No sólo hemos recibido bonitas palabras y mucho cariño, también regalos de forma totalmente altruista del colegio Charles Dickens, del estudio fotográfico Entretretú&yo de Loeches y de la Fundación Pequeño deseo, sendos regalos para que Sofía pasara su enfermedad de la manera más suave”.
La familia muy emocionada nos comunica que no tienen palabras para expresar y agradecer todo lo que han hecho por la pequeña Sofía. ¡Un millón de gracias!